Si un segundo antes de morir de inanición
a Vallejo le hubieran dado el Nobel todo
sería distinto
Vallejo premio Nobel diría en los libros de
historia,
y de seguro a Van Gogh la vida le hubiera
reservado algo agradable
justo antes de que se cortara la oreja
justo antes que se perdiera en ajenjo de tanto
ser olvidado,
quizás algún marchand compraría alguna de sus
obras,
o alguna muchacha de las que pasean por las
orillas del Sena
se hubiera detenido un segundo a admirar su
cara de atormentado,
de bueno para nada,
todo eso para garantizar el futuro premio Nobel
de Vallejo.
Porque si Vallejo fuera premio Nobel
se podría meditar con más calma,
ya no fuera tan precisa la convicción
de que la vida es una mierda.
Siendo Vallejo premio Nobel
tú y yo también seríamos un poco premio Nobel
aunque no nos postularan,
aunque nadie diga se merece un Nobel:
un país de premios nobeles,
un país de bebedores de ajenjo y desorejados.
un país de bebedores de ajenjo y desorejados.
Vamos a cantarle una nana a la noche.
Vamos a cantarla junto a Van Gogh y Vallejo.
Y los que nunca jamás seremos premios nobeles,
ni de contra: Porque para ser premio Nobel
no basta con morir en París con aguacero.
Marcial Gala (Cienfuegos - Cuba -)
Cuaderno de Poesía # 6 de Poetas sin sofá
Cuaderno de Poesía # 6 de Poetas sin sofá
Basta con morirse de lo que sea para no ser Nobel.
ResponderEliminarPero hay otros premios más humildes. Celebrémoslo.