A más dificultad para la rima,
mayor satisfacción para el poeta
al ver que si practica la receta,
será su creación la más opima.
La gloria de alcanzar por fin la cima,
exige el sacrificio del esteta
tratando de alcanzar la ansiada meta,
razón que en el camino más lo anima.
Las reglas y exigencias son murallas
que el genio del poeta ha de escalar,
para poder colgarse las medallas;
de versos que merezcan un altar
junto a las nueve musas, dulces ayas
que Apolo en el Olimpo le ha de dar.
Castellón, febrero de 2012.
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