Hay
mañanas que amanezco
y
soy la mujer de rojo sobre fondo gris.
Mi
sonrisa cromática
se
adapta como un camaleón
al
paso de las horas.
Hay
días en los que creo reconocer
al
pintor que captó mi esencia
y
dejó su huella en mi lienzo
para
perdurar en el tiempo.
Hay
tardes en las que me difumino
y
la hipérbole de mis caderas
pasa
desapercibida
entre
las líneas paralelas de tu mirada.
Cada
noche soy la mujer gris sobre fondo rojo.
Desdibujada
entre las sábanas
me
diluyo como témpera en agua,
soñando
con la mano que me vuelva a dar vida.
Esperanza Fernández
Cuaderno de Poesía #10 de Poetas sin sofá
Esperanza Fernández
Cuaderno de Poesía #10 de Poetas sin sofá
¡Maravilloso poema! Cada verso es un poema en sí mismo... Quiero firmarlo!
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